Vinícola Urbana

Ayer fui a un evento que se llamó “El Vino y La Mujer”. Se llevó a cabo en Polanco en un lugar muy original llamado “Vinícola Urbana”. Ya había escuchado de este lugar pues me enteré que ellos le producen vinos a pequeños restaurantes o tiendas y les ponen su etiqueta. Sin embargo, al enterarme sobre el evento, quise aprovechar para darme una vuelta y conocerlo.

Resulta que en el corazón de Polanco, en la terraza de un cuarto piso hay una micro-vinícola con nueve variedades de uvas, plantadas en jardineras especiales. La idea  fue traer a la ciudad todo un viñedo y proceso de producción del vino.

El enólogo de la vinícola, nos dio un tour donde explicó cómo sobreviven las vides al clima del DF siendo tan distinto al de Ensenada. Nos contó que un lado de la terraza recibe más horas sol (por su orientación) y estas uvas se desarrollan mucho mejor que las demás. Además nos dijo que para simular su hábitat natural, traen tierra directo del “Valle de Guadalupe” y la colocan en una jardinera especial. También incluyen una capa de piedras de tezontle para que retenga calor durante el día y se lo irradie a la planta durante las noches frías del DF. Si no llueve, se riega “por goteo” dos veces a la semana.

Estos primeros cuatro años queremos ver qué variedades se dan mejor, y una vez que encontremos las que tienen más potencial, queremos vinificar con estas uvas. En promedio una vid toma cinco años en dar uvas para hacer un vino respetable dijo Vicente. Actualmente se producen cinco etiquetas aquí en el Distrito Federal con uvas traídas del Valle de Guadalupe. Todas tienen nombres emblemáticos del DF:

  1. Revolución
  2. Ángel
  3. Zócalo
  4. Diana
  5. Bellas Artes

El evento de ayer estaba dirigido a mujeres, y la anfitriona, Laura Díaz de la Vega, dio inicio al decir que

el vino es similar a la mujer gracias a su gran capacidad de expresión.

En las mesas había varios platos muy coloridos con distintas, frutas, hierbas, especies

, y chocolates. El ejercicio consistió en ir probando cada uno de estos alimentos en el orden en el que aparecen al degustar cualquier vino, mientras ella explicó el proceso de producción. En mi artículo de “Cómo catar un vino”, mencioné que lo primero que detectamos, son los aromas primarios: Frutos rojos, negros y  aromas herbales. Después vienen los aromas secundarios o lácteos y finalmente los terciaros o torrefactos que aporta la barrica: vainilla, chocolate, frutos secos. etc.

Esta dinámica ayuda para recordar con claridad los aromas y sabores que se pueden encontrar en el vino, pero me hubiera gustado que la cata fuera parte del ejercicio. Sin embargo, al momento de catar el vino Diana, el ejercicio, ya había concluido. Diana está hecho de uva Cabernet Sauvignon y tiene aromas a jamaica, pimiento morrón y hierbabuena. Este vino tendrá su mejor momento en un año.

Si algún día tienes ganas de un plan diferente, ir a Vinícola  Urbana es una buena oportunidad de introducirte al mundo del vino, cuando no tienes la de viajar. Los vinos están disponibles en Palacio de Hierro y City Market. Habrá que probarlos todos para encontrar cuál es el mejor.

 

www.vinicolaurbana.com